<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d27936134\x26blogName\x3dL3nor3\x27s+Hideout\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://l3nor3s-hideout.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_ES\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://l3nor3s-hideout.blogspot.com/\x26vt\x3d-1484409629104694555', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Broken innocence 30 de mayo de 2006 |

Rota.
Hoy me siento rota. Me falta algo. Algo no va bien.
Echo de menos el no tener que pensar en nada.
Echo de menos el ser una niña pequeña sin preocupaciones.
Cómo desearía poder ser otra vez esa niña.
Inocente.
Libre de toda responsabilidad.
Incorruptible.
No quiero crecer.
Quiero ser yo. En estado puro.
No quiero que me influyan, que me corrompan.
Me cierro al mundo.
Solo quiero ser yo. Sola. YO.
Mmmm… echo de menos esa inocencia.
El mundo estaba hecho para mí. Estaba a mis pies.
Qué vana ilusión.
Ahora te subyugan. Te esclavizan.
Ya no eres tu.
Ahora eres quien ellos quieren que seas.
Y ya no me reconozco.
Me miro al espejo y la que me devuelve la mirada no soy yo. No.
No soy yo.
Y no hay vuelta atrás. ¿O si?
¿La hay? ¡¿LA HAY?!
Sí, la hay.
Pero no es fácil.
Es incluso más difícil que dejarte dominar.
Tienes que luchar contra todo, contra todos.
Y al fin podrás ser tú otra vez.
Pero te dejas muchas cosas en el camino.
Una vez que sales ya no puedes volver.
Y lo echarás de menos.
Porque todo será más difícil.
Ahora dime… ¿de verdad quieres escapar? ¿De verdad quieres ser tú misma?
Ser uno mismo duele. Pero es un dolor tan dulce…
¿De verdad quiero ser yo misma? ¿Volver a ser inocente? ¿Sin preocupaciones? ¿De verdad?
Sí que quiero, lo que no sé es si estaré dispuesta a sacrificarme. A sacrificar la comodidad del esclavo por las incomodidades de una persona libre. No lo sé.


How long, how long will I slide?
I’m not who you want me to be. I’m just… me.

>> Heart vs. Mind << 26 de mayo de 2006 |

Y cuando la mente no puede controlar el corazón...oh shit!! I want my mind back!!

Me gustaría plantearos una pregunta: ¿quién domina verdaderamente vuestros actos: el corazón o la mente?
Siempre se ha hecho esta distinción entre cuerpo y alma, mente y corazón, razón y sin razón. ¿Existe verdaderamente esa separación? Realmente no lo sé. Pero lo que sí es cierto es que a la hora de tomar una decisión tú misma sientes esa división, ya sea real o imaginaria. Sientes que te partes en dos. Tu 'corazón' va por un lado y tu 'cabeza' por otro. Y no se ponen de acuerdo. Y existe una tercera parte neutral que las pasa canutas pensando qué será mejor, a quién escuchar.
Me considero una persona bastante racional que siempre rige sus decisiones con lógica, con la 'cabeza'. Pero a veces (en contadas ocasiones) el 'corazón' hace su gran aparición en escena y me lo jode todo. Dice tonterías, cosas que no tienen sentido y que sin embargo mi 'cabeza' no es del todo capaz de rechazar. La confunde, la marea. Es como una droga. Me hace tomar decisiones equivocadas. Decisiones que puede que me perjudiquen. Pero aún así, aún cuando todo puede irse a la mierda, lo escuchas. Y le haces caso. Y te equivocas. Y te arrepientes. Y te juras a ti misma que no volverás a escucharlo. Que no merece la pena. Y sigue ahí. Y es parte de ti. Sabes que volverá. Y sabes que harás lo mismo una y otra vez. Porque aunque pensemos que nuestra 'mente' es fuerte, nuestro 'corazón' lo es más.

Verde 22 de mayo de 2006 |

Cierro los ojos y camino. Camino por estas sendas verdes y frescas. Mmmm... me siento bien. Parece como si mis pies siguieran un camino que habían recorrido anteriormente. No recuerdo haber estado allí antes. Es agradable no pensar, solo me dejo guiar por mis pasos. No caeré. Sé que no caeré. Siento la brisa en la cara, en los brazos. El murmullo de las hojas. El piar de los pájaros. Qué delicioso momento. Y me asaltan recuerdos. Sol. Calidez. Risas. Felicidad. Y me siento bien. Sonrío. Y mis pies ya no tocan el suelo. Mi alma ya no forma parte de mi cuerpo. Puedo escapar. Soy libre. Libre.... Y cuando despierto sigo allí caminando. Pero la luz ya no es tan brillante. Frío. ¿Y el sol? Llanto. ¿Y la risa? Tristeza. ¿Y la felicidad? Todo ha desaparecido. Fue solo un rayo de sol entre las espesas nubes negras. Fue solo una risa entre un mar de lágrimas. Fue solo una brizna de felicidad en este valle de tristeza. ¿Y cuándo volverán el sol, la risa, la felicidad? En realidad siempre han estado ahí. Al alcance de mi mano. Los puedo sentir. Puedo soñar con ellos. Estan detrás del manto gris de la vida. Solo tengo que apartarlo. Es tan fácil como alargar la mano. Pero tengo que dar ese paso. ¿Realmente quiero darlo? Podría pasar que la luz me ciegue. Que mis labios se agrieten de tanto reír. Que mi corazón no pueda aguantar tanta felicidad. Pero podría pasar que la luz guíe mi camino. Que mi sonrisa ilumine mis labios. Que mi corazón se haga más fuerte. Creo que por esta vez cruzaré. Dejaré que todo me inunde. Y si todo se va a pique... entonces nadaré. Y volveré a salir a flote. Y volveré a buscar la luz. Porque merece la pena sufrir cien años por un instante de felicidad.

Añoranza 16 de mayo de 2006 |

Una noche.
Un beso.
Otro beso.
Y más besos.
Mmm....besos.
Y su mirada.
Y su sonrisa.
Y su pelo.
Y su voz.
Le echo de menos.
Una noche.
Ojalá pudiera sentirme así con todo el mundo.
Tan en paz.
Tan YO misma.
Tan cómoda.
Y quiero verlo otra vez.
Sentirlo otra vez.
Sus labios.
Su sonrisa.
Su pelo.
Y oír su voz.
Y sentirme en paz.
Y ser YO misma.
Y sentirme cómoda.
Y perderme en sus ojos.
Y que no me importe el resto del mundo.
Solos él y yo.
Solo sus labios con los míos.
Y sentir miedo.
Y sentir vértigo.
Y sentir escalofríos.
Y sentirlos con él.
Yo solo.....
ESPERO

Él 11 de mayo de 2006 |

- Está loco.
- ¿Y qué?
- Dicen que se empanoia mucho.
- ¿Y qué?
- Es muy raro.
- ¿Y qué?
- Tiene ideas raras.
- ¿Y qué?
- No tiene móvil.
- ¿Y qué?
- Es antisistema.
- ¿Y qué?

¿Qué más da todo eso? ¿Acaso debe estar cuerdo, no emparanoiarse, ser normal, tener ideas normales, tener móvil y estar a favor del sistema? Acaso tu estás cuerdo, no te emparanoias... en resumen... ¿acaso tú eres normal? Y si lo eres... qué es ser normal. Me gustaría saberlo... para intentar no cruzarme a nadie por la calle que lo sea.

Yo misma estoy un poco loca, soy un poco rara, y voy en contra del sistema. El problema es que hay que tener valor suficiente para no esconderse, para ser como eres abiertamente, sin miedo.

Si es verdad que Él es todas esas cosas quiero descubrirlo por mí misma.

Enamorada del reflejo de un sueño.

¿¿Seguridad o inseguridad?? |

Mmmmm...
Qué delicioso fue aquel momento en que lo vi. Sentí ese pellizco que siente todo el mundo, sí. Sentí como mi corazón se paraba por un instante...como si quisiera quedarse en ese segundo eternamente. Sentí que el mundo ya no era el mundo, que el mundo éramos solo él y yo.
Más tarde todavía pensando en cómo acercarme a él sin ser advertida, él se acercó a mi. Una frase sin sentido, solo una frase sin ningún significado...así empieza todo. ¡Qué simple! Luego más frases. Una detrás de otra. Primero él, luego yo. Y todo sigue su curso, los engranajes empiezan a moverse. Todos calculan su próximo movimiento. Él su próxima sonrisa arrebatadora. Ella su próxima mirada seductora. Y todo sigue su curso. Lo típico. Lo normal. Nada de ser originales. ¿Para qué? Tal como dicen: mejor malo conocido que malo por conocer. ¿Pero realmente hace falta todo eso? Horas, minutos, segundos desperdiciados. Desde el primer instante sabes que lo conseguirás...o no. Lo sabes todo desde el principio. Pero no quieres saberlo. No. Horas, minutos y segundos desperdiciados, sí. Pero tú querias desperdiciarlos. Solo para reforzar tu idea de que puedes hacerlo. Puedes conseguirlo. ¡Qué tonteria! ¡Cómo nos gusta poder plantearnos una meta sabiendo que vamos a ganar! Luego lo consigues. ¿Y ahora qué? Ya lo tienes. Ya es tuyo. ¿Y ahora qué? Ahora nada. 2 meses. Nada. Ahora nada. Pero piensas que mereció la pena. Que todavia eres capaz de conseguirlo. Que lo volverás a conseguir. Por que si en ese momento sabes que no vas a ganar, entonces ese momento no existe, no ha existido. Luego sigues buscando, hasta que sabes que vas a ganar. ¿Y luego qué? La misma historia.

¿No es mejor no saber si vas a ganar o perder cuando lo has sabido durante tanto tiempo?

¿No es mejor no perder el tiempo?

Pero tu no quieres eso, eso te hace sentirte insegura.

¡Ay! Maldita seguridad. Cuando no la tienes la buscas y cuando la tienes no la quieres.

Welcome!! |

Bienvenidos a mi nuevo blog!! ^^

Creé este blog para poder escribir cosas....no sé...quizá mis pensamientos....cosas que me gustan...lo que se pase por mi cabecita :) De momento esto es todo....cuando se me ocurra algo ya lo pondré.

Kisses!!